LA PANTERA YA RUGE TAMBIÉN DESDE LOS ONCE METROS

Al margen de la contundente victoria por 5-0, el partido de ayer ante el Sporting de Huelva trajo varias noticias destacadas en el seno del Atleti. Una de ellas fue el estreno goleador de Ludmila da Silva desde el punto de penalti al transformar una pena máxima que había sido cometida sobre ella misma. 

(Foto: captura de pantalla y Twitter Club Atlético de Madrid)

Todos los aficionados rojiblancos sabemos que los lanzamientos de penaltis han sido históricamente uno de los grandes talones de Aquiles tanto del equipo femenino como del masculino. Han sido innumerables las veces que el jugador o jugadora que ha ejecutado el disparo ha fallado en su intento de hacer gol y  muchos de esos fallos han supuesto eliminaciones de competiciones europeas, pérdida de partidos importantes o, incluso, la derrota en la final de la Champions de Milán (dejando al margen el grave error arbitral reconocido por el propio colegiado años más tarde y que privó al Atleti de la victoria sin la necesidad del penalti fallado por Griezmann y sin tener que llegar a la tanda de penaltis). 

Centrándonos en el equipo femenino, la situación en las últimas temporadas con los lanzamientos de penas máximas tampoco ha sido buena. Han sido varias las futbolistas que en las diferentes temporadas se han encargado de efectuar los lanzamientos de penaltis, unas de manera más habitual que otras: Jenni Hermoso, Ángela Sosa, Deyna Castellanos, Merel van Dongen... Las dos primeras sí solían estar más acertadas en sus disparo desde el punto de penalti. Sin embargo, en las campañas más recientes fueron Deyna Castellanos y Merel van Dongen quienes asumieron la responsabilidad de esos disparos y el porcentaje de aciertos de ambas fue bajo. Cada vez que había un penalti a favor del Atleti, los aficionados colchoneros solían pasar de la alegría inicial tras la señalización del mismo al temor y a los nervios por saber la dificultad que tenían las jugadoras para transformar la pena máxima y, por último, a la decepción cuando el lanzamiento no terminaba en gol. Exceptuando la semifinal de la Supercopa de España disputada contra el Barcelona y en la que el Atleti doblegó al cuadro catalán en la tanda de penaltis, en otros momentos fundamentales de eliminatorias de Champions o de encuentros ligueros los penaltis a favor han sido una losa para el conjunto madrileño. 

El caso más sangrante se produjo en la eliminatoria de Champions que el Atleti disputó contra el Chelsea en 2001. En el partido de ida, Deyna Castellanos y Merel van Dongen erraron sendos lanzamientos de penalti. Y no quedó ahí la cosa: en el encuentro de vuelta, Toni Duggan estrelló el disparo de otra pena máxima en el larguero de la portería rival. Esos tres errores le costaron al Atleti el adiós a la Champions de aquella temporada, última vez que el equipo rojiblanco ha competido hasta el momento en el máximo torneo europeo por clubes. 

Cuando ayer Ludmila fue derribada en una veloz internada en el área onubense, la delantera brasileña se levantó del césped, agarró el balón con determinación y se dirigió al punto de penalti. Fue una sorpresa ver a Ludmila colocar el esférico en el punto fatídico pues era la primera vez que lo hacía en un encuentro oficial con el Atleti. La atacante de Guarulhos mantuvo la calma, efectuó un buen y certero disparo hacia la derecha con el que engañó a la guardameta rival y la batió anotando el que es su cuarto gol en Liga esta temporada. Primer lanzamiento de penalti y primer gol por parte de Ludmila. Es cierto que el marcador era ya favorable al Atleti y que eso restaba algo de tensión a la hora de efectuar el disparo, pero un penalti siempre hay que meterlo y Ludmila no falló. 

Cada partido es un mundo y habrá que ver si la brasileña vuelve a tomar la responsabilidad en un próximo penalti, pero viendo lo bien que lo ejecutó ayer, su templanza y su seguridad a la hora de disparar, es de esperar que sea ella la que se encargue de lanzar en un futuro los penaltis del conjunto colchonero. 

De momento, Ludmila escribió ayer una nueva página como jugadora atlética al marcar su primer gol de penalti. La pantera ya ruge también desde los once metros.