ATLETI, HAY QUE AMPLIAR EL CONTRATO DE LUDMILA

Nos encontramos en plena vorágine de altas, bajas y renovaciones en el Atleti Femenino. Ya se sabe, por ejemplo, que Virginia, Maitane y Bárbara Latorre no seguirán la próxima temporada vistiendo de rojiblancas. También hemos conocido las renovaciones por una temporada más de Estefanía Banini y de Marta Cardona. Queda mucho trabajo por hacer todavía en estas semanas estivales y es evidente que lo más urgente ahora es intentar renovar a aquellas jugadoras que terminan contrato en junio de 2023 y de las que aún no se tienen noticias (Sheila García o Eva Navarro, por ejemplo) y reforzar el equipo con nuevas incorporaciones. Sin embargo, para mí hay algo que el Atleti debería acometer también lo antes posible: la ampliación de contrato de Ludmila da Silva.  

La futbolista brasileña finaliza su relación contractual con el club en junio de 2024 y, como todos sabemos, Ludmila se encuentra lesionada de su rodilla derecha y no podrá reaparecer hasta bien entrada la campaña 2023-2024. Por lo tanto, tendrá pocos meses para participar con el equipo en un año que para ella es muy importante por la finalización de su contrato. Además, si antes de enero no ha ampliado su vinculación con el Atleti, pasaría a ser agente libre y tendría la posibilidad de negociar con cualquier otro equipo de cara a la temporada 2024-2025. Y creo que ningún aficionado colchonero queremos que Ludmila deje de defender nuestra camiseta. No voy a volver a repetir aquí otra vez todo lo que la "pantera" supone para el equipo en cuanto a entrega, lucha, compromiso y sacrificio (ya he escrito muchas veces sobre ello). Ludmila, simplemente, es insustituible. 

Además, si comparamos la duración actual que tienen los contratos de las otras dos capitanas del equipo con el de Ludmila, es el de la brasileña el que antes finaliza. A Carmen Menayo se le amplió el contrato en diciembre de 2021 hasta junio de 2025. Más recientemente, el 3 de enero de 2023, se prolongó el contrato de Lola Gallardo hasta junio de 2026. En cambio, el contrato de Ludmila sigue sin ampliarse y creo que se merece de sobra esa extensión contractual siempre y cuando a ella le apetezca seguir con nosotros, claro está. 

Por el bien del equipo y de la propia afición, espero que Lola Romero no tarde mucho en ofrecerle a Ludmila una prolongación de su contrato por varios años, prolongación que se ha ganado a pulso partido a partido desde que llegó al club y esta temporada todavía más, pues se destrozó las dos rodillas contra Barcelona y Real Madrid respectivamente por ser tan pundonorosa y tan noble en su esfuerzo por defender nuestro escudo. A ninguna otra jugadora le ha ocurrido ni le ocurrirá eso, solamente a Ludmila. Y es que Ludmila siente al Atleti de forma especial.